
Anton LaVey (Levey de nacimiento) es una de las figuras más controversiales de la contracultura norteamericana. Es famoso por haber fundado la Iglesia de Satán en los años sesenta en la ciudad de San Francisco. Su apariencia física con sus ojos rasgados, sus orejas casi puntiagudas, su barba negra de chivo, rememora a los satánicos villanos de las historias pulp Doctor Fu Manchu y Ming el despiadado.
Pero lejos de su imagen pública como un villano o un mago negro, la realidad es que se trató de un hábil mentiroso que supo escandalizar a la sociedad de su tiempo.
Nacido en Chicago en 1930, fue una figura revolucionaria y un músico talentoso para sus seguidores, pero para muchos otros (incluyendo su hija Zeena), un charlatán, un mentiroso compulsivo y un hombre hambriento. LaVey, quien se autodenominó “Papa Negro”, fue un hombre que supo crear una leyenda a su alrededor, cosa que al final, como mal estafador, terminó creyéndose.
Primero está decir que LaVey nunca fue un verdadero satanista: fue un ateo racionalista que usó la figura del diablo como base de su filosofía y como una forma de ganar dinero, por supuesto, aunque la mayoría de los primeros adeptos de la Iglesia de Satán creyeron en Satán como una identidad real.
Fundada el 30 de abril de 1966, la misma Noche de Walpurgis (más tarde el publicista de LaVey, Edward Webber, afirmó que en verdad se fundó en el verano, pero cambiaron la fecha para darle un aire místico), la Iglesia de Satán causo un gran escándalo a nivel mediático. La prensa sensacionalista se alimentaba de las excentricidades del Papa Negro, los extravagantes rituales en los que una mujer desnuda servía de altar mientras que LaVey vestía una capa negra, una capucha de cuernos y hacía el papel del villano en los medios. Más que un ocultista fue un showman, un hombre de circo que heredó el lema del cirquero P.T Barnum (a quien hace una dedicatoria en su Biblia Satánica): “Cada minuto nace un tonto”.
Con esa frase se puede resumir todo el satanismo laveyano. Las influencias para su satanismo fueron el objetivismo ateo de Ayn Rand, el darwinismo social, las historias de terror de revistas pulp como Weird Tales, el ambiente de los circos de los años treinta y cuarenta, y la cultura pop americana. En palabras de su hija Zeena: “Él no tenía demasiados conocimientos sobre el tema y lo que hizo fue crear sobre la marcha una versión posmoderna del satanismo.”
A estas alturas verán que LaVey no es de mi agrado. Él hizo de la magia, del lado oscuro y de lo oculto un espectáculo vulgar para las masas. El satanismo de LaVey no es lo mismo que el satanismo tradicional (por darle un nombre), sino una invención yanqui con todo lo vacío y vulgar que puede tener esa cultura.
Muchos son los que han revelado a LaVey como un fraude, entre ellos se encuentra su hija Zeena Schreck; músicos de black metal noruego, quienes lo repudian y odian que la prensa los relacione (en todos los álbumes editados por Øystein Aarseth (alias Euronymous) del grupo Mayhem está la figura tachada del Papa Negro), como Euronymous quien lo veía como un corruptor del verdadero satanismo, y Varg Vikernes quien lo ve como una extensión del cristianismo; antiguos discípulos como Michael Aquino (fundador del Templo de Set), y el periodista Lawrence Wright quien se encargó de escribir un artículo revelando que varios hechos asombrosos narrados por el Papa Negro fueron mentira, aunque Wright sí admiraba a LaVey como músico, y publicó su artículo para la revista Rolling Stone en septiembre de 1991.
Este texto fue empleado por Zeena para su documento titulado: “Anton LaVey: Leyenda y realidad”, coescrito con su pareja Nikolas Schreck, y fue publicado después de la muerte de su padre. Resultó ser más mordaz y furibundo que el artículo antes mencionado. En él se desbaratan muchos de los mitos que el propio LaVey se dedicó a propagar para crear su leyenda, como que nunca trabajó como fotógrafo para la policía de San Francisco, no hay registros suyos entre los empleados del Departamento de Policía y Frank Moser quien fue fotógrafo por aquel entonces menciona que nunca lo conoció; otra mentira suya es que de adolescente trabajó en el Circo Clyde Beatty como domador de leones: el circo no tiene ningún registro suyo.
Otra de sus mentiras fue que había sido amante de Marilyn Monroe antes de que ella alcanzara la fama, pero tanto Robert Slatzer, amigo íntimo de Marilyn, y Harry Lipton, su representante, han desacreditado esta historia. La exesposa de LaVey, Diane, admitió que falsificó la letra de la actriz para un calendario que supuestamente le dedicó.
En el mismo documento, Zeena destroza la imagen que su progenitor vendió a los medios como un amoroso padre de familia. En realidad golpeaba frecuentemente a su esposa, tanto, que existe una denuncia en su contra en 1984 por casi estrangular a Diane; también maltrataba y abusaba de sus discípulas a las que forzaba a la prostitución para quedarse con sus ganancias. Su hija Zeena también cuenta cómo su padre informó a un acosador sobre su ubicación y su asistencia a un evento público, poniéndola en peligro.
Respecto a la Biblia Satánica contrario a la versión de la Iglesia de Satán no fue escrita para tener un credo o guía escritural, fue solicitada a LaVey por la editorial Avon Books para aprovechar la moda del satanismo. LaVey plagió varios textos, sobre todo el libro El poder tiene la razón, del autor bajo seudónimo, Ragnar Redbear .
Escrito en 1896, El poder tiene la razón es un tratado sobre darwinismo social en el que se defiende el derecho de los más fuertes sobre los pueblos más débiles como parte de la ley natural. La autoría del libro hasta la fecha es un misterio, pero se cree que las personas tras “Ragnar Redbear” pueden ser el escritor neozelandés Arthur Desmond y el novelista norteamericano Jack London.
Así, LaVey copió varias ideas y pasajes del libro, pero distorsionándolos para ajustarlos dentro de su visión hedonista de la vida, quitando toda la parte racial y antisemita del texto original. LaVey pregonaba un estilo de vida basado en los placeres y el hedonismo, algo que es rechazado tajantemente en la obra original.
Pese a su origen judío, este coqueteo con el darwinismo social llamó la atención de varios grupos neonazis que se acercaron a la Iglesia de Satán, entre ellos James Mason (autor de Siege y amigo personal de Charles Manson) y el Partido de Resistencia Nacional de Estados Unidos. Este acercamiento fue breve, aunque LaVey se mofaba de ellos en privado.
Los sesenta fueron una época en la que surgieron diversas sectas y espiritualidades en Estados Unidos, desde el seudo-budismo adoptado por los beatniks y más tarde por los hippies, hasta cultos neopaganos. En este contexto LaVey aprovechó el momento para poder tener fama y dinero. El satanismo que organizó solo buscaba el hedonismo, el vivir el momento, por lo que muchos de sus primeros miembros lo fueron abandonando decepcionados, tal es el caso de Michael Aquino, quien de ser un prominente discípulo del Papa Negro, fundó su propia orden llamada El Templo de Set (a la que más tarde ingresarían Zeena y su esposo Nikolas), usando la figura del dios egipcio Set—en la concepción de Aquino, un arquetipo más antiguo que el Satán del cristianismo—y enfocándose en la magia y el ocultismo más que en el escándalo.
Antes de morir LaVey quería que su leyenda perdurara, pero todas sus historias fueron derribadas, aunque sus pocos discípulos defienden aun las doctrinas de su maestro. Actualmente, el satanismo laveyano es una ideología sin ninguna seriedad. No fue un ocultista, no fue un hombre sabio, fue alguien que supo llamar la atención de la prensa sensacionalista al ponerse un atuendo llamativo y realizar rituales públicos. El satanismo laveyano fue, a fin de cuentas, una moda sesentera que perdió impulso y credibilidad con el pasar de los años y el autoproclamado Papa Negro, quien supuestamente abriría una nueva edad satánica, resultó ser solo un mitómano que terminó viviendo su propia mentira, siendo un icono para una cultura vacía.
[Este trabajo fue publicado en una primera versión en la desaparecida revista digital Operación Marte el día 14 de noviembre de 2017 en México.]
Fuentes:
“Anton LaVey: Leyenda y Realidad” Por Zeena y Nikolas Schreck
“La hija de Belcebú”. Entrevista a Zeena Schreck
https://www.vice.com/es/article/dpqx3x/la-hija-de-belcebu-0000118-v6n4
Gavin Baddeley “El Resurgimiento de Lucifer: Pecado, Culto satánico y Rock and Roll”
Anton Szandor LaVey, una de las mentes más brillantes de la historia. El único corazón valiente que se atrevió a luchar contra el orden establecido. Todos vamos de buenos, de mojigatos. Yo no hago esto, yo no hago lo otro … Pero en el fondo lo deseamos .. deseamos la transgresión, el pecado. El poder de Anton LaVey es muy grande y os aseguro que Él está más vivo que nunca. No caigáis en la ignorancia de la opinión pública, del dictado de una sociedad enferma y controlada por unos patrones y «leyes» pre-establecidas. Leed un poco sobre Él y sus grandes, elevadas y coherentes teorías. Lo que Él promulgó, todos sus pensamientos, lo que Él buscó en su vida, es lo que buscamos todo el mundo, es lo que pensamos todos. La única diferencia es que Él jamás se escondió, mintió ni quiso parecer bueno, al contrario de nosotros, de esta sociedad enferma de hipocresía. Como testimonio personal, deciros que este Hombre que difamáis y de quien os reís, Salvó mi vida de una muerte segura, a causa del cristianismo y sus opresoras y estúpidas leyes, que me llevaro al borde de la muerte, por la Tiranía de Dios. Él me rescató y curó mis heridas con su libertad, fuerza y amor verdadero y real. No como el Dios que vosotros adoráis, que es todo crueldad y sadismo con sus hijos, quienes tan sólo son un juguete en sus manos con los que divertirse. Rege, Satan. Ave, Anton Szandor LaVey. Siempre serás El Mejor. Único e Irrepetible. Shemhamforash. ❤
Pero que opinas sobre su hija zeena y todas sus revelaciones?
jajaja…imbeciles….la verdad esta dicha lavey era un figuretti
como le tienen de bronca los progrestupidos posmodernillos de este “blog” a anton lavey solo por ser hombre blanco y heterosexual. me imagino que si burras como barbijaputa o la pobre loca de danna alquati defienden el satanismo no dicen lo mismo verdad hipocritas? que se les ven las costuras de progrestupido mangina al que escribio este bodrio.
posdata: sus respuestas no me importan y sus insultos me dan la razon y demuestran lo que ustedes son. incel? machista? ya me se esos rebuznos y los he leido con mi novia partiendonos de la risa jajajaxD